La situación del transporte en Cuba es uno de los aspectos más tétricos que laceran la sociedad cubana.
Johanna Jolá Álvarez ha alzado su voz para denunciar públicamente el trato injusto hacia los pasajeros de vuelos nacionales en Cuba, exigiendo respuestas y soluciones al Ministro del Transporte, Eduardo Rodríguez Dávila. En un contexto de creciente descontento y deterioro de los servicios de transporte, la prensa independiente ha dado seguimiento a esta situación que refleja las profundas carencias y la falta de transparencia en la gestión del sector.
En una publicación reciente en Facebook, donde el ministro anunciaba el restablecimiento parcial del sistema de climatización en la Terminal 3 del Aeropuerto Internacional José Martí de La Habana, Jolá Álvarez aprovechó para exponer su inconformidad. Ella explicó que muchos viajeros provenientes de provincias, tras pagar costosos taxis para llegar a la Terminal 1 de La Habana, son informados de que serán trasladados en ómnibus en lugar de abordar los vuelos originalmente programados, sin previo aviso, explicación ni reembolso por el cambio de servicio.
Además, Jolá Álvarez relató cómo en ocasiones los aviones no salen el mismo día, obligando a los pasajeros a esperar toda la noche con su equipaje en las afueras de la terminal, ya que no se les permite permanecer dentro. Esto ha generado indignación y una sensación de desamparo entre los viajeros, quienes se sienten ignorados y maltratatados por las autoridades.
La falta de comunicación sobre los cambios o cancelaciones, a pesar de que todos los pasajeros dejan sus números de teléfono, es otro punto crítico señalado por Jolá Álvarez. La ausencia de reembolsos para aquellos que experimentan cambios drásticos en su tipo de transporte también es una preocupación importante. Ella se pregunta quién recibe las quejas de la población y dónde están las respuestas para los clientes afectados, reflejando una problemática que afecta a miles de cubanos diariamente.
Lisbette CG, otra internauta, compartió su propia experiencia, mencionando las largas horas de espera e incertidumbre sobre si los vuelos saldrán, y las condiciones deplorables en que los pasajeros, incluidos niños y bebés, reciben una merienda pírrica tras siete horas de espera.
Por otro lado, un video publicado por Joan Licourt en redes sociales mostró la desidia del gobierno al dejar deteriorarse aviones viejos en el aeropuerto de La Habana, aviones que quizás podrían haber vuelto a volar. Este video evidencia el abandono y la falta de mantenimiento de los recursos del país, agravando la crisis del sector aéreo.
La movilidad entre provincias en Cuba es un gran problema, con muchas personas que se ven obligadas a recurrir a transportistas privados debido a la escasez de opciones estatales y los asaltos en la autopista nacional, situación que se agrava aún más por la falta de vuelos nacionales. El régimen cubano, en un intento de justificar esta situación, anunció en 2023 la exploración de la posibilidad de adquirir nuevas aeronaves para revitalizar su sector aéreo, que lleva años sin vuelos a importantes destinos internacionales por falta de aviones. Sin embargo, estas promesas parecen lejanas y no abordan las necesidades inmediatas de la población.