Glenda Neninger Alom, una cubana residente en Unión de Reyes, Matanzas pidió ayuda en redes sociales para localizar en Rusia a su hermano, Brian Jesús Hernández Alom, del que dijo había llegado a ese país el 14 de noviembre, pero tuvo un accidente y han perdido contacto con él.
La mujer indicó que la familia tiene entendido que Brian Jesús "se cayó de un edificio; lo que sabemos hasta el momento es que está hospitalizado en algún hospital de Kotelniki, pero nadie sabe darnos información de él ni en dónde pueda estar con certeza".
La mujer detalló que no tienen noticias desde la noche del 17 de noviembre.
"Aquí en Cuba la familia está desesperada porque ya hace tres días que no tenemos noticias y nadie sabe nada. Por favor, quien sepa algo o lo haya visto, que nos informe", concluyó Glenda Neninger Alom en una publicación hecha el pasado 20 de noviembre en el grupo de Facebook Cubanos en Moscú.
La hermana de Brian de Jesús Hernández no ofreció otros detalles sobre las circunstancias en que su hermano habría caído desde un edificio, ni otras precisiones sobre el extraño incidente.
Kotelniki, la ciudad en que presuntamente estaría ingresado el migrante en un hospital, está ubicada a unos 22 km al sureste del centro de Moscú. En el apartado comentarios, varios internautas instaron a la mujer a ponerse en contacto con la Embajada de Cuba en Rusia.
"Normalmente a ellos se les informa de cualquier acontecimiento relacionado con los cubanos que están en el territorio ruso", apuntó una mujer. Otra usuaria del grupo precisó que el correo de la embajada de Cuba es Rusia es viceconsul1@ru.embacuba.cu
"Escriban a la embajada para que contacten a los hospitales", recomendó otra comentarista. Una cuarta internauta aludió a una iglesia en Moscú, llamada "Zarza Ardiente", que hace una semana encontró a un muchacho en un hospital y pidió a Glenda que actualice en el grupo en cuanto tenga noticias de su hermano. Hasta el cierre de esta nota no hay otros detalles del caso.
La presencia de cubanos en Rusia ha sido un tema controversial, especialmente en el contexto de la guerra en Ucrania. Desde mediados de 2023, han circulado reportes sobre la participación de ciudadanos cubanos en el conflicto, muchos de ellos reclutados bajo promesas de sueldos altos y la posibilidad de obtener la ciudadanía rusa.
Los reclutadores, a menudo a través de contactos informales por WhatsApp, ofrecieron contratos con el ejército ruso, que incluían pagos de hasta 2 mil dólares mensuales, una cifra que nada tiene que ver con los salarios promedio en Cuba. Sin embargo, muchos de estos cubanos, atraídos por la necesidad económica, no fueron informados adecuadamente sobre la naturaleza de sus roles y se encontraron combatiendo en la primera línea del frente sin el equipo necesario ni el entrenamiento adecuado.
Este fenómeno también refleja una dinámica más amplia de emigración económica. Dado el colapso económico en Cuba, muchos han buscado nuevas oportunidades en países como Rusia, ya sea para comerciar o para establecerse de forma permanente. La falta de opciones en la Isla ha impulsado a muchos a explorar destinos menos tradicionales como Rusia, donde pueden aprovechar los incentivos ofrecidos por el gobierno de Putin, que ha facilitado la nacionalización para aquellos que se alistan en el ejército
Este fenómeno es complejo, pues aunque algunos cubanos han llegado a Rusia en busca de trabajo o mejores condiciones de vida, la situación para los involucrados en la guerra ha sido mucho más difícil de lo esperado, con muchos enfrentándose a duras realidades en el campo de batalla. La falta de transparencia y la explotación de la desesperación económica de los cubanos ha generado preocupación, tanto dentro como fuera de la Isla
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