La Plaza de la Revolución de La Habana, uno de los espacios más emblemáticos del poder político en Cuba, amaneció este miércoles con un nombre muy distinto en Google Maps: “Plaza Díaz-Canel Singao”. El cambio, que se mantuvo activo durante varias horas, generó sorpresa entre los usuarios y se interpretó como una forma de protesta digital dirigida contra el presidente cubano y el sistema que encabeza.

El rebautizo temporal evidenció una vez más la vulnerabilidad de este tipo de plataformas ante modificaciones sugeridas por usuarios. Google permite enviar solicitudes para corregir o actualizar nombres de lugares, aunque estas pasan por un proceso de revisión. En algunos casos, los cambios pueden aparecer públicamente de manera momentánea antes de ser verificados o retirados.

De acuerdo con las normas de la compañía, nombres ofensivos, insultantes o con carga política suelen ser eliminados rápidamente, y quienes intentan manipular información de este tipo pueden enfrentar sanciones, incluida la suspensión de la cuenta. Es previsible que la plaza recupere su denominación oficial una vez revisado el incidente.

No es un hecho aislado. En años recientes, varios puntos de interés y edificios estatales en Cuba han sido objeto de cambios temporales en Google Maps, utilizados por activistas y ciudadanos como herramienta simbólica para expresar inconformidad con el Gobierno. En 2021, una campaña promovida desde dentro y fuera de la isla logró que la Plaza de la Revolución apareciera brevemente como “Plaza de la Libertad”, en un gesto coordinado de protesta digital.

Aunque estas modificaciones no son permanentes, sí revelan cómo internet se ha convertido en uno de los pocos espacios donde los cubanos pueden manifestar críticas o inconformidad, en un país donde la disidencia pública continúa siendo limitada y a menudo reprimida. Incluso un simple mapa digital puede transformarse en un escenario inesperado de resistencia simbólica frente al control estatal.

Recomendado para ti