Como una pesadilla, así califican varios cubanos su experiencia al ser expulsados de Grecia, un país que atraviesan miles de emigrantes hacia regiones de Europa occidental.

Un joven de 25 años que se identificó solo como Reniel, dijo al medio Al Jazeera que vive un círculo vicioso de terror.

Él relató que las autoridades griegas los expulsaron a Turquía y que allí se ha quedado sin opciones: “me preocupa ser ilegal en un país al que ni siquiera elegí ir”, explicó.

En una entrevista con Al Jazeera, el cubano expuso que los oficiales griegos confiscaron su pasaporte y no se lo devolvieron, luego de eso lo obligaron a cruzar a Turquía.

Reniel señala que informó sobre la expulsión al consulado cubano en territorio turco; sin embargo las autoridades diplomáticas le dijeron que “el gobierno griego no deporta a ningún cubano”, por lo que ahora mismo está en un limbo.

Los ciudadanos de Cuba han llegado cada vez con más frecuencia a Grecia en un trayecto donde parten desde Rusia y cuyo destino final son naciones como España e Italia.

Los cubanos utilizaron esta vía durante 2021 aprovechando el visado libre a naciones de Europa oriental, para salir de la isla y lograr establecerse en  países con una mejor economía.

Pero Grecia los ha confrontado evitando su paso, en 2021 llegaron a sobrepasar los 600 los nacidos en Cuba que quedaron varados en ciudades como Antenas.

Ahora la prensa europea esta dando visibilidad a lo que han sufrido varios de estos emigrantes, víctimas de una práctica denunciada por organizaciones de derechos humanos: la expulsión forzosa hacia Turquía.

Human Rights Watch dijo en agosto pasado que hay “una creciente evidencia de que el gobierno griego ha expulsado en secreto en los últimos meses a miles de migrantes”.

CubitaNOW se hizo eco en diciembre de 2021 del testimonio de un médico cubano detenido por las autoridades locales y expulsado forzosamente a Turquía.

Él forma parte de una comunidad de 34 cubanos en Estambul, todos los cuales fueron expulsados por policías griegos hacia territorio turco.

El médico contó que los agentes, lo torturaron, golpearon y le robaron sus papeles, además lo llevó junto a otros emigrantes hacia una franja fronteriza y fue obligado a caminar para el lado de Turquía.

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