Un alarmante episodio de violencia sacudió recientemente a la comunidad de Glendale, Queens, cuando Feliz Enrique, un hombre de 31 años que se encontraba en libertad condicional, fue acusado de atacar sin motivo a una niña de apenas nueve años y luego morder gravemente a un sargento de la policía de Nueva York que intentó intervenir.
El violento incidente fue captado por una cámara de seguridad y ha provocado conmoción en la ciudad.
Según el informe emitido por la fiscal de distrito de Queens, Melinda Katz, Enrique se acercó a la menor el pasado 10 de mayo mientras ella jugaba tranquilamente en la calle, le preguntó su nombre y, sin previo aviso, la abofeteó con fuerza. “La niña cayó al suelo, visiblemente herida, y fue trasladada de inmediato al hospital, donde se le diagnosticaron hematomas en brazos y espalda, sangrado en el labio, dientes flojos y un considerable dolor físico”, indicó el comunicado.
"El ataque, captado en video y divulgado por medios como ABC News, muestra un acto completamente arbitrario de violencia infantil, que deja al descubierto las fallas del sistema al liberar a un individuo con antecedentes graves sin seguimiento adecuado"
Enrique había cumplido siete años de prisión por intento de homicidio y se encontraba en libertad condicional al momento del ataque.
El sargento Sebastian Hajder, del NYPD y fuera de servicio ese día, presenció el ataque y no dudó en intervenir. Según la fiscal Katz, “actuó como un buen samaritano y como un policía comprometido con su deber, al seguir al agresor y confrontarlo”. Durante el forcejeo, Enrique mordió al oficial en la rodilla y la mano, causándole heridas graves. “La mordedura en uno de los dedos fue tan severa que la punta no pudo ser reimplantada, lo que resultó en una desfiguración permanente”, informó el New York Post.
Enrique fue arrestado y procesado por múltiples cargos, incluyendo agresión, acoso y poner en peligro el bienestar de un menor. Si es hallado culpable, podría enfrentar hasta 25 años de prisión. Su próxima audiencia está prevista para el 10 de julio.
El caso reaviva el debate sobre la vigilancia de personas en libertad condicional con antecedentes violentos. Mientras tanto, las autoridades instan a la población a reportar cualquier situación de abuso o violencia, especialmente cuando involucra a menores o ancianos. Para ello, están disponibles líneas como el 911, 988 o el 1-800-799-SAFE, además de recursos digitales en www.988lineadevida.org y nycwell.cityofnewyork.us.
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